Diciendo adiós

Marcos, mi amor chico, regreso a este nuestro refugio en busca de tu ayuda...de nuevo la vida se vuelve difícil ..y pocas fuerzas me restan ya...uno jamás piensa o quiere ver que todo puede acabarse, igual que la vida misma...Marcos, mi pequeño, deseo con toda mi alma que me sigas amando con tanta pureza sin importarte mis errores de mortal... ámame más que nunca porque es cuando más lo necesito.Empiezo a transitar un nuevo camino...si mis pasos se pierden ,si mi brújula se queda sin imán, si mi respiración se vuelve lenta, si mis ojos no ven la luz...guíame...sabes que confió a ciegas en ti.
Te amo,tu mamá para siempre.