Alegoría

Hace pocos meses me presenté un día en el cole a la hora de la salida del mediodía, llevaba una mochila con unos bocatas y algo para picotear…quise darle una sorpresa a Daniel y me le llevé a comer a la Ría de la Rabia, cerca de Oyambre. Allí dónde nos sacamos unas fotos juntos aquella primavera del 2004, tú tenías 10 meses, estabas precioso y empezabas casi a caminar por ti mismo…es esa foto en la que estamos tú y yo juntos, levantas una mano como diciendo: ehh aqui estoy !….es la misma foto que mandé a la redacción de la revista en que se publicó el reportaje….Pues bien, allí nos fuimos Daniel y yo juntos, solos, habíamos pasado días atrás situaciones algo tensas, días de esos en que mi paciencia no lo es tanto y nos alejábamos. Así que decidí en menos de una hora que necesitabámos de ese espacio para nosotros dos solos, para acercarnos, para charlar, para disfrutar del aire fresco y de la naturaleza….es un lugar precioso….espacio natural protegido donde llegan infinidad de aves migratorias….y todo sucedió de inesperado….
Estábamos allí sentados, junto a aquellas barcas abandonadas y en tan mal estado …hablábamos de recuerdos bonitos, de lo que nos amamos…y fue entonces cuando ante nuestros ojos aquellos dos cisnes que allí estaban , todavía picoteando los restos de migajas de pan que les habíamos lanzado, nos regalaron esta preciosa y maravillosa imagen….Daniel pronunció tu nombre…yo también…..
Te amo, amor mío….cuánto te echo de menos…que insoportable es esta ausencia….