jueves, 8 de febrero de 2007

A TÍ, TESORO, A TÍ MARCOS

Marcos, amor, te amo, te echo de menos pero voy llegando a vivir, quiero entender tu existencia, quiero aceptar tu vida, mi vida, mi muerte, tu muerte, pero es muy delicado y costoso.
Voy aprendiendo a vivir de otra forma, a darle sentido a aquello que realmente hoy por hoy me hace sentir vivo, me hace entender que esto tiene algún sentido, que este dolor , este sufrimiento que supone no tenerte entre mis brazos, no escuchar tu vocecita es algo por lo que no puedo pasar de puntillas, y que siendo esto tan fuerte hay algo en la vida, en mi vida que me hace que pueda asumir esta existencia y que me haga creer que mi existencia tiene un fin.
Quizás me pongo demasiado profundo pero no puedo hacer más que esto para seguir adelante, y amar es el único camino, amarme a mi mismo, en primer lugar para poder luego extender este amor a mi entorno, al mundo, y empezar a entender tras meses de estar en un estado catatónico, de confrontación con el mundo, con la realidad aparente, de incredulidad ante la experiencia que vivo.
Hoy creo que amo más que nunca, que te amo tanto como cuando estabas a mi lado fisicamente, diría que te amo de una forma especial ya que vas conmigo, en mi corazón, puede resultar un tópico, pero lo digo a partir de mi experiencia, de mi vida.
Gracias Marcos, te amo. papá.

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